Cada vez estamos más concienciados con la importancia de derribar las desigualdades socioeconómicas, de identidad, de género, raciales... y por el bien común somos conscientes de que es imprescindible edudar en valores de igualdad.
Los juguetes y la manera de jugar siempre han sido un fiel reflejo de cada sociedad, de cada era y de cada coyuntura geográfica y social.
Llegados a estas fechas, y teniendo en cuenta que la Navidad cada vez empieza antes, seguro que muchos padres y muchas madres ya andáis pensando en qué podríais regalarles a vuestros hijos.
Son muchos los artistas y los creativos empeñados en mostrar que la realidad no es tan ideal y tan encorsetada como muchos de nuestros iconos infantiles nos enseñaron; ni las princesas Disney son ejemplo de una feminidad patriarcal, ni Barbie es la esposa/amiga/madre/trabajadora perfecta.
Sabemos que todos los adjetivos que se le puedan otorgar al Duque Blanco no son suficientes para describir a una de las personalidades y uno de los talentos más arrebatadores y descomunales que se han conocido en el mundo de la cultura y las artes.
Y es que el año nuevo y los buenos propósitos llegan para todos, icluso para el ciclado, hombre estrella de Mattel y pareja de Barbie, el rubiales de Ken.
Tras encuestar a 8.000 madres (este dato nos chirría, que solo hayan entrevistado a madres, a ningún padre), Barbie descubrió que el 86% de ellas están preocupadas sobre a qué tipo de modelos de conducta están expuestas sus hijas. Por ello, han decidido lanzar 17 nuevas muñecas inspiradas en mujeres icónicas, famosas por motivos ejemplares, de todo el mundo.
