Fotografías del mítico Café de Flore de París
Juliette Gréco, Ernest Hemingway, Trumane Capote, después Roman Polonski, Brigitte Bardot, Alain Delon, Belmondo e Yves Saint Laurent, son solo algunas de las personalidades que han dejado pedacitos de su vida en este mítico café parisino.
El Café de Flore es uno de los dos legendarios cafés de Saint-Germain-des-Prés, junto con su eterno vecino, les Deux Magots. En su preciosa sala art déco y sobre la terraza que da directamente sobre el boulevard Saint-Germain, han dejado su huella poetas, actores, escritores, actrices, musas, filósofos y lugareños. Un café con historia y hecho de historias que abrió sus puertas en 1880, durante la Tercera República.
Georges Bataille, Robert Desnos, Léon-Paul Fargue, Raymond Queneau fueron solo algunos de los que dejaron su huella entre las paredes del café, Pablo Picasso era otro de los asiduos.
Jean-Paul Sartre, durante la guerra dejó para la inmortalidad la frase: "Puede parecer extraño, pero estamos como en casa en el Café de Flore ". Y es que estos personajes pasaban los días con todas sus horas, en muchas ocasiones, inmersos en la magia de este mítico café parisino.
Hoy día, sigue abriendo sus puertas y sus recuerdos a todos los parisinos y al resto del mundo.
El chocolate caliente es una de las especialidades de la casa. Alto lugar del París intelectual, el Flore acoge y otorga todos los años el Prix de Flore (creado por Frédéric Beigbeder), recompensando cada vez un nuevo y joven talento de la literatura
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Por Silvia García
