Las vaquitas, otro lamentable y alarmante caso de especie en extinción
Es muy triste y da mucha rabia la manera en la que anteponemos los intereses de tipo económico y mercantil a la vida, la vida de muchas especies que por las sucias y egoístas actuaciones del hombre están desapareciendo, extinguiéndose para siempre. Las Vaquitas son el último caso, sólo quedan doce.
Flip Nicklin para National Geographic Creative
Esta pequeña especie de cetáceo marsopa que habita en la parte Norte del Golfo de California vió disminuido su número de 300 en 1997 a 30 en 2017 y continúa desparareciendo; actualmente sólo quedan 12.
La Vaquita es como un pequeño delfín que vive de forma aislada en aguas cálidas y poco profundas; sus características manchas en la piel las hacen merecedoras del apodo "pandas del mar".
Dos vaquitas en el Golfo de California (foto de Paula Olson, NOAA [Public Domain], vía Wikimedia Commons)
Están siendo víctimas de la pesca de Totoaba, una especie de pez mexicano que puede alcanzar el precio de 50.000 dólares en el mercado negro chino.
Las vaquitas quedan atrapadas en las redes de estos pescadores furtivos que siguen prefiriendo saltarse las leyes en pro al beneficio económinco que pueden obtener.
A este paso, las vaquitas que quedan no van a llegar a la próxima temporada de pesca ilegal.
Pescadores preparando sus redes en Campo Serena, Golfo de California
A pesar de las prohibiciones por parte del Gobierno Central de México, los pescadores siguen con sus actividades ilegales convencidos de que la extinción de las vaquitas va a facilitarles sus objetivos.
Para salvar la vida de estos cetáceos, a parte de las restricciones impuestas inservibles, se ha intentado criar a algunos en cautiverio pero perdieron la vida al dejarlos en libertad, por lo que la esperanza de supervivencia de la especie, se está agotando.
Una vaquita con botes de pesca al fondo (foto de Paula Olson, NOAA [Public Domain], vía Wikimedia Commons)
Aunque las esperanzas son mínimas y la especie acabe por desaparecer por completo, Andrea Crosta de la organización Elephant Action League declara que "...les debemos a ellas contar su historia completa, la verdad, para derribar a los responsables que, por cierto, no son los pescadores".
Nos conmueve y no entristece enormemente que, cada vez, sean más normales este tipo de noticias, que los intereses monetarios sean tan fuertes que anulen las posibles soluciones a que la vida siga su curso de manera natural, algo de lo que nos vamos a arrepentir más pronto que tarde.
h/t: My Modern Met
Por Luiki Alonso