Descifrar enigmas produce mucho placer

Desde el comienzo de los tiempos, uno de los campos que suscitan más incógnitas es el de la sexualidad femenina, por suerte la compañía sueca de juguetes eróticos LELO se encarga de dar respuesta con cada nuevo lanzamiento. En esta ocasión, se han propuesto revelar la maravillosa experiencia de los orgasmos mixtos, un placer ahora alcanzable gracias a ENIGMA.

Con una apropiado diseño en forma de interrogante, este innovador juguete erótico integra un succionador de clítoris y un estimulador de punto G, dando como resultado una combinación bien avenida que promete revolucionar la masturbación femenina con una cascada incontrolable de sensaciones.

Desvelando estos misterios, el placer femenino deja de ser un enigma. No obstante, la historia de la humanidad sigue estando cuajada de enigmas aún por resolver en todos los ámbitos: historia, arqueología, astronomía… ¿llegaremos algún día a descifrarlos todos?

1. La tumba de Cleopatra. Fue una amante excepcional, cuyas técnicas de seducción lograron conquistar a dos de los hombres más poderosos del mundo: Julio César y Marco Antonio. La localización del sepulcro de Cleopatra sigue siendo un enigma arqueológico, custodiado por las arenas o las aguas de Egipto. Los indicios apuntan a que fue enterrada junto a su amado Marco Antonio, pero nada se sabe de su paradero. Acompañada o no, seguro que la última reina faraónica sigue disfrutando de su sexualidad desde el más allá como sólo ella sabe hacer. Una no se convierte en mito erótico de la nada.

2. Epidemia de baile en 1518. Han pasado más de 500 años, pero este caso de coreomanía sigue siendo todo un misterio. Ocurrió en Estrasburgo, a mediados de 1518, una mujer llamada Frau Troffea comenzó a mover el esqueleto de forma descontrolada, cientos de personas se unieron a su baile originando una gran plaga de danza. No sabemos qué motivaría esta histeria colectiva danzarina, pero quizás aquellos que están enganchados a los challenges de baile de TikTok puedan descifrar este enigma.

3. El misterio de Tunguska. Situado en la meseta de la Siberia Central, Tunguska es un pequeño pueblo conocido por un misterioso fenómeno que tuvo lugar en 1908. Una mañana los campesinos de la zona vieron como el cielo se partía en dos, la tierra temblaba y más de 80 millones de árboles se cayeron a consecuencia de una explosión atronadora. Las teorías más consistentes aseguran que se trató de un meteorito, pero la ausencia de cráter suscitó todo tipo de alocadas teorías. En muchas habitaciones también han tenido lugar este tipo de temblores y nada tenían que ver con meteoritos *guiño, guiño*.

4. Luces de Marfa. Constituyen el fenómeno paranormal más longevo y famoso de Estados Unidos. Se trata de unas luces del tamaño de un balón de baloncesto que, de vez en cuando, realizan una danza lumínica en los alrededores de Marfa, un pequeño pueblo de Texas. El lema de la ciudad dice “Difícil de llegar. Más difícil todavía de explicar. Pero una vez estés allí, lo entenderás”, es curioso, pero esa misma frase bien podría valernos para definir las sensaciones provocadas por un orgasmo mixto…

5. Las hadas de Cottingley. En 1920, dos niñas inglesas agitaron a toda una sociedad al asegurar que veían hadas. Y no sólo eso, sino que podían probar su existencia con imágenes. Encontraron en sir Arthur Conan Doyle, creador de Sherlock Holmes, uno de sus más firmes defensores. Pronto se supo que era todo un fraude, todavía nos preguntamos cómo fue posible que tanta gente, incluido el escritor escocés, se 'tragaran' algo tan burdo. Aunque conociendo las leyendas de su Edimburgo natal, cómo no iba a creer Doyle en la existencia de hadas. Es lo mismo que nos sucede a los usuarios de apps de ligar con tanto ghosting, ¿cómo no vamos a creer en fantasmas?

Estos son sólo una selección de misterios que le quedan por resolver a la humanidad, pero la lista es infinita y se engrosa con cada año que pasa. Quizás en algún momento podamos descifrarlos, pero de momento la incógnita del placer doble se ha despejado gracias la incansable investigación de LELO que ha culminado con la creación de ENIGMA.

Este juguete erótico es el resultado de la unión de dos de los productos más apreciados de LELO, el succionador de clítoris SONA y el conejito SORAYA. Esta unión sin precedentes nos permite alcanzar límites de placer nunca antes explorados.

Combinando las ondas sónicas que estimulan el clítoris hasta su raíz y las suaves pulsaciones en el punto G, ENIGMA revela la maravillosa experiencia de los orgasmos mixtos para que atravieses nuevas fronteras del placer como nunca antes.

Sus ocho patrones de vibración te permitirán personalizar la estimulación, dependiendo de lo que desees cada momento, y la silicona ultrasuave te brindará la experiencia sensual definitiva. Llegó el momento de explorar, disfrutar y hablar sobre sexualidad desterrando prejuicios y desvelando misterios.

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