La fecha de nacimiento de los selfies podría ser datada en diciembre de 1920, cuando los fotógrafos de la Compañia Byron posaron juntos para una foto en el techo del estudio de Marceau. La mayoría de sus imágenes se conservan en el Museo de la Ciudad de Nueva York.
En esta serie de fotos pseudo-pornográficas, "Interiores Obscenos" por el artista sudafricano Brandt Botes (también conocido como Von Brandis), nuestra imaginación rellena los espacios en blanco. Utilizó imágenes de escenas pornográficas de los 70 y 80 que se encuentró en internet y eliminó - literalmente - de todas las partes íntimas. Lo que queda es la silueta blanca y su imaginación. !Nos gusta que nuestras voluptuosas y obscenas mentes se empleen para este buen uso!
Descubramos a las mujeres más bellas de los años 1920
El artista belga Sammy Slabbinck combina fotografías de época con estilos compositivos contemporáneos, para crear dinámicos collages. El tipo de humor de su obra y su sutil crítica social pueden ser fácilmente pasados por alto por el espectador casual.
Ilustraciones del artista británico John Holcroft.
John estudió Diseño Gráfico en Sheffield, Inglaterra. Fue en los años 90 cuando sucumbió a la tentación de la ilustración. Comenzó a pintar en acrílico sobre tela y fue influído por David Cutter y Edward Hopper.
Siempre tratando de mantener su obra actual, John ha reinventado su estilo de media docena de veces desde entonces. Su última encarnación es un efecto de impresión de pantalla creado digitalmente e inspirado en anuncios antiguos y embalajes de los años 50.
George Gross (1909-2003) fue un artista de portadas de revistas pulp. Pintó como freelance cientos de cubiertas pulp para Action Stories, Air Stories, Baseball Stories, Complete Northwest, Detective Book Magazine, Fight Stories, Football Stories, Jungle Stories, North West Romances, and Wings.
Como todos los artistas pulp, todo giraba alrededor de las damas: damas en apuros, damas al mando, damas disparando y amando e incluso siendo maltratadas por guardias de campos de prisioneros japoneses. George Gross supo que su camino estaba ligado al de la figura femenina, vivió hasta los 94 años, siguió pintando damas hasta su muerte.
