No hay nada más erótico que provocar a la imaginación desde la sutileza que supone insinuar sin ser explícito. Un movimiento lleno de delicadeza y suavidad puede evocar a la carnalidad más absoluta.
Todos y todas recordamos esa escena de Lost In Translation en la que Scarlett Johansson está tumbada en la cama con unas bragas rosas translúcidas como una de las escenas más sexis del cine contemporáneo. Las curvas de su turgente anatomía contrastan con la inocencia que destila un personaje que no parece ser consciente del deseo que despierta.
Una sensación parecida es la que nos provocan las pinturas al óleo del corenao Ho Ryon Lee, visualmente seductoras y provocativas.
Inspiradas en modelos reales, sus piezas toman vida y forma después de hacer varias fotos de las mismas en poses sensuales y reveladoras, creando una intensa sensación de movimiento que se ve favorecida por unos contornos que se presentan borrosos, como si viéramos doble, quizás embriagados y embriagadas de amor.
Ho Ryon Lee nació en 1978 y ha dedicado la mayoria de su trabajo pictórico a plasmar estos cuerpos de mujeres que se revelan a través de faldas levantadas o bajadas. Sus anónimas protagonistas se presentan como exhibicionistas que exponen explícitamente su feminidad al margen de los mirones.
La intención del artista es atraer la mirada fuera de la pantalla y estimular el deseo más allá de los cinco sentidos. "La diferencia entre fotografía y pintura se revela inevitablemente en la representación de la luz a través de los pigmentos y las pinceladas, lo que posiciona claramente mi trabajo como una imagen pintada".
A pesar del realismo de sus pinturas, se distinguen claramente de una fotografía por la libertad de los colores y trazos, que solo pueden transmitirse por los pigmentos. Lo que sí es real, es el anhelo que despiertan.
Ho Ryon Lee: Web