Como si del pasaje de un cuento clásico se tratasen, las instantáneas de esta rusa nos invitan a adentrarnos en la fuerte conexión que desprenden sus princesas con estos animales del bosque.
Blancanieves nos regaló una de las escenas del cine de animación más recordadas en cuanto a conexión con la naturaleza se refiere, cuando la princesa entona el tema Sonreír y cantar a coro con los pájaros del bosque, mientras que el resto de animales se congrega alrededor de su voz y la siguen por el sendero de vuelta a casa.
Ese aura mágico, esa unión tan íntima e indescriptible que Blancanieves consigue tener con la fauna salvaje, es lo que la fotógrafa Anastasiya Dobrovolskaya consigue capturar en sus imágenes.
Osos, toros, liebres… no hay animal que se resista a la lente de la rusa, pero hemos querido centrarnos en los zorros y en su majestuosa belleza.
Además del típico ejemplar rojo que todos visualizamos cuando pensamos en esta especie, en las fotografías podemos ver cómo su pelaje también puede ser blanco y negro.
La fotógrafa cuelga su trabajo en su cuenta de Instagram, donde queda patente su talento para crear universos con ese toque a princesas de cuento, sobre hielo, en entornos encantados. Los animales actúan como confidentes, hechizados por los poderes de las protagonistas de las historias y siendo sus mejores compañeros en plena naturaleza.
A nosotros nos ha absorbido el aura que desprenden las imágenes de Dobrovolskaya y nos encantaría poder trasladarnos a ese universo en el que, como en los cuentos, nada es imposible y podemos ser capaces de crear un estrecho vínculo con los zorros del bosque.