Si pudiéramos visitar una hondonada mágica el paraje seguramente albergaría elementos muy similares a las esculturas de luz creadas por el fotógrafo brasileño, Vitor Schietti.
Los escenarios fantásticos que genera este artista multidisciplinar se agrupan en su serie fotográfica experimental, ‘Impermanent Sculptures’.
El proyecto iniciado por Schietti en 2015 utiliza la asombrosa técnica de pintura de luz, en la cual la luz se convierte en un improvisado pincel y el espacio retratado es el lienzo inspirador.
Aunando diferentes focos de luz artificial: fuegos artificiales, luces led, faros de coches o luces urbanas... con la fotografía de larga exposición, el creador consigue iluminar de manera fulgurante los paisajes de Brasilia, su ciudad natal.
Las oníricas composiciones enmarcan las escenas nocturnas de una manera dramática y misteriosa al tiempo que los incontables filamentos de vívida luz blanca gotean sobre las copas y las ramas de los árboles.
Las esculturas etéreas -como el propio Schietti se refiere a ellas- semejan el rastro de una bengala agitada juguetonamente a través del aire frío de la noche.
El método de trabajo del artista no sólo requiere creatividad, la paciencia es una parte esencial de su proceso de creación.
Esto se debe a la corta duración de la hora crepuscular, momento idóneo para capturar este tipo de instantáneas. Tan sólo dura entre 30 y 50 minutos, por lo que el fotógrafo debe ser veloz y metódico.
"La serie es el resultado de varios años de investigación sobre fotografía de larga exposición, y el uso de filtros ND fue vital para encontrar un equilibrio perfecto entre el crepúsculo que se desvanece y el brillo de los fuegos artificiales", recalca el brasileño.
Vitor Schietti: Instagram