Las obras de Ella transmiten alegría y viveza. Sus collages están hechos cuidadosamente a mano y comparten un elemento característico: unos labios femeninos que suelen estar estratégicamente colocados.
Aunque lleva desde niña pegando y recortando, es en 2013, tras una visita a Los Angeles, cuando la artista encuentra su visión creativa actual y elige las bocas rojas como marca de sus creaciones.
«Los labios suelen ser un elemento muy importante en mis obras. Esto es por la importancia que tiene la mujer y su poder en mis collages, donde esas bocas femeninas gritan contra la deshumanización.
Están meticulosamente posicionados para transmitir el mensaje y/o rendir el homenaje, sin embargo tengo que admitir que me gusta mucho dejar libertad al espectador para “leer” libremente la obra, a pesar de que mi mensaje siempre esta ahí. También hago trabajos donde no encontrarás labios, aunque cuando así es, suelen decirme que se echan de menos», explica a Cultura Inquieta.
Le gusta conjugar elementos surrealistas con fotografías y fondos más terrenales; naturaleza y mujer, así es como consigue este poderoso y colorido resultado.
«Mis collages nacen puramente de mi imaginación que a su vez esta “salpicada” por experiencias vividas (encuentros, viajes, noticias, paisajes, situaciones).
Yo no trabajo en una mesa, sino que lo hago en el suelo de mi estudio, siempre inundado por un océano de imágenes donde voy jugando y encontrando elemento a elemento lo que quiero contar. Paso las horas rodeada de mis fotografías tomadas en viajes, libros antiguos, revistas vintage o cualquier imagen que pueda caer en mis manos; cortando al detalle con bisturí y tijeras cada pieza para ir creando lo que necesito expresar», confiesa la artista.
También comparte que no hay nada extraordinario en sus fuentes de inspiración más allá de mantener los ojos abiertos a todo lo que le rodea, estar en el momento y no dejar de ser nunca curiosa. Son las personas importantes para ella y los artistas que la rodean los que la ponen en órbita. Tan solo un elemento que considera muy necesario en su vida y que le dan mucha calma: las palmeras.
Ella Jazz nos regala con sus collages una vía de escape rodeada de cielos y palmeras en la que expresar libremente aquello que necesitemos gritar al mundo.