Una artista, casada y madre de dos niñas, ha revolucionado el concepto de la tradicional fotografía de familia, con una serie de polémicas imágenes titulada Domestic Bliss (Felicidad doméstica).
Después de pasar años como una abnegada madre, prestando constantemente y casi de forma exclusiva atención a sus niñas, haciendo infinidad de fotografías en las que nunca jamás aparecía ella misma, a la ex bailarina Susan Copich se le ocurrió la idea de este proyecto fotográfico único, pensó que podía girar la cámara hacia sí misma, de recuperar su identidad, y de "mostrar una serie de honestidad emocional".
Cada una de las imágenes de la serie Felicidad Doméstica tiene lo que Susan llama una "vuelta de tuerca de las tinieblas". El toque tenebroso es su elemento más audaz, que desafía nuestra percepción normal de la felicidad familiar.
Disfrutemos de sus inquietantes fotografías..