Cuando Marlon Brando pasó rugiendo por la ciudad en su motocicleta en The Wild One, popularizó la cazadora negra de cuero como símbolo de la moda rebelde.
Los motociclistas habían usado las chaquetas de cuero como protección, pero éstas fueron rápidamente adoptadas por los músicos de rock (desde Eddie Cochran, Gene Vincent o The Beatles, hasta Elvis) como una reafirmación de su estatus de outsider.
Aunque las modas cambiaron en la década de 1960 al denim suave y los colores psicodélicos, la chaqueta de cuero negro nunca perdió su estatus icónico como vanguardista, radical y subversivo.
La chaqueta de cuero negro de los estudiantes revolucionarios del París del 68, se convirtió en el uniforme de moda de la caótica Baader-Meinhof, antes de regresar a su hogar espiritual formando los trajes combinados de los rockeros proto-punk The Ramones.
Joey, Johnny, Dee Dee y Tommy hicieron que la chaqueta de cuero negra fuera imprescindible para los punks, y pronto se convirtieron en última moda vendidas por los astutos Vivienne Westwood y Malcolm McLaren en su boutique SEX de Londres.
Los adolescentes de todo el Reino Unido compraron chaquetas baratas de cuero negro o de imitación de cuero y las decoraron con los nombres de sus bandas favoritas, lemas políticos o mini manifiestos escritos con Tipex, pintura o esmalte de uñas.
Había un arte naif en ese bricolaje, una singularidad que encapsulaba la esencia del punk (su capacidad de ofender) y el carácter del dueño de la chaqueta.
Esta pequeña selección de fotografías capta algunas de chaquetas punk de cuero DIY, desde las primeras de mediados de la década de 1970 a las posteriores, con un código de vestimenta más consciente de la moda, de los años 1980 y 1990. Hoy en día, una chaqueta de cuero punk con tachuelas e insignias te costará 200 dólares en eBay.
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