Hay artistas que ponen su creatividad y su ingenio a prueba autorretándose: en contra de lo que se cree, muchas veces la imaginación funciona mejor bajo presión, marcada por límites de tiempo.
La artista británica Anna Whitehouse pensó un día en su taller si sería capaz de crear 100 piezas de cerámica exclusivas en 100 días y se puso manos a la obra.
No sólo decidió limitarse a un período de tiempo pre establecido, si no que también decidió limitarse a crear partiendo de una única forma, la de botella; el resultado es increíble.
Cada botella de cerámica blanca tenía una forma uniforme, pero los diseños que creaba en la superficie diferían cada día; perforó algunas botellas con pequeños agujeros repetitivos, mientras que otras se cubrieron con aplicaciones similares a hojas o motivos florales; yendo un paso más allá hay algunas que quedan huecas formando carcasas que envuelven volúmenes más pequeños.
Whitehouse explica partes de sus proceso creativo, "Intenté presionar y raspar la arcilla con cualquier herramienta que cayó en mis manos, desde mis utensilios específicos para arcilla hasta tapones de bolígrafo, pinzas, tijeras e, incluso, un collar de cuentas"
La artista también optó por hacer sus propias herramientas a partir de trozos de bolígrafo roto, alambre y aluminio para crear marcas particulares.
El reto que se impuso Anna no sólo ha resultado gratificante a nivel artístico ya que, como ella misma señala, su proyecto ha constituido un bonito proceso de aprendizaje en el que cada nuevo diseño era un boceto que no se repetiría en el siguiente, con la idea de que cada nueva botella siempre sería mejor que la anterior.
Whitehouse señala, "He mantenido el trabajo sin esmaltar, como las páginas en blanco de un cuaderno de bocetos...".
Después de completar su proyecto, Whitehouse creó un "calendario de arcilla" ("Clay Calendar") en el que describe cada botella que hizo desde el 1 de enero hasta el 10 de abril de 2018 y muestra los nombres de cada pieza que están inspirados en algo que sucedió durante el día en el que se hicieron.
Nos gusta mucho la obra de Whitehouse, un precioso y preciso trabajo de artesanía no apto para tripofóbicos.
Anna Whitehouse: Instagram | Web
h/t: Colossal