Nos atrevemos a decir que casi nadie puede resistirse a sentarse a contemplar la magia de un atardecer en algún momento de su vida y, desde que tenemos móviles, casi nadie ha escapado de la tentación de inmortalizar ese cálido momento del día.
Ahora que está a punto de empezar el verano, las redes sociales y los dispositivos móviles se llenan de capturas en las que el cielo anaranjado y el sol crepuscular se convierten en los protagonistas. El fotógrafo Krutik Thakur reinventa con maestría estas postales vespertinas jugando con las siluetas de sus modelos.
La magia, la imaginación, los sueños y lo onírico se mezclan en cada una de las piezas que crea Thakur.
Aunque el fotógrafo reconoce haber usado la edición digital en sus primeras composiciones, en 2021 se dio cuenta que prefería que el desafío fuera el proceso en lugar del resultado y se aventuró a usar su creatividad a la hora de realizar sus singulares tomas.
"En enero de 2021, decidí introducir algunos cambios y me desafié a mí mismo a no usar software de edición, excepto para algunas gradaciones de color. Fue entonces cuando comenzaron los verdaderos desafíos.
Había duplicado mis esfuerzos con mucha planificación, tomas y retomas, esperando el cielo y el sol ideales. Hubo muchos intentos fallidos detrás de cada trabajo que muestro, pero me encanta el reto que supone esta montaña rusa que he elegido y seguiré haciendo lo mismo".
Como él mismo cuenta, poco a poco comenzó a depender más de los elementos naturales con una edición mínima y fue una transición suave ya que no abandonó por completo la edición, pero poco a poco mejoró sus habilidades y puso todos sus esfuerzos para no ser conocido como un fotógrafo digital.
A sus 22 años, Thakur ha convertido en su sello de indentidad la habilidad de incorporar el sol poniente en cada escena como si fuera un objeto tangible que sus sujetos pueden sostener en sus manos, guardar, lanzar o simplemente adorar como ese elemento que nos da la vida y nos llena el alma de emociones.
Krutik Thakur: Instagram