Si pensamos en nuestros cuerpos y nuestros cueros como lienzos vírgenes sin explorar, las posibilidades que ofrecen nuestras líneas corporales y nuestras formas son casi tan infinitas como la inspiración que provocan.
Así, Lin Yung Cheng crea un arte único, a partir de su obsesión por las figuras geométricas, los trazos definidos y las pieles de sus modelos de cuerpos elásticos y flexibles.
Más conocido como 3CM, Yung Cheng es un fotógrafo taiwanés que se centra en retratos de mujeres con algún tipo de manipulación corporal, ya sea literal o simbólica.
Sus retratos difuminan la línea entre fotografía y escultura, cuerpo y objeto, y con ellos intenta investigar el concepto de feminidad de una manera crítica y provocativa.
Apelando a la libertad de disfrutar nuestros cuerpos y sentirnos bien por lo que somos o tenemos, el artista cree que esa supuesta libertad sigue siendo un espejismo que de alguna manera roba la identidad femenina para ofrecer una falsa promesa de respeto y amor.
"La intención principal es debatir el tema de la moralidad, especialmente en las mujeres...la forma en la que la sociedad de hoy en día define a las mujeres es bastante estrecha, moralista y carente de libertad, y especialmente los medios de comunicación influyen determinantemente en ella".
En esta serie de imágenes, la mente dibuja sobre el cuerpo geometrías incompletas o imperfectas como si obligara a respetar reglas que no lo caracterizan y le impusiera normas estéticas o de proporción.
Por su parte, los hilos rojos tensos cosen formas sobre la piel y parecen demostrar la resistencia que tiene nuestro cuerpo para aguantar cualquier tipo de daño físico o moral.
Lin crea todo un universo que es ambiguo, sensual y crudo como ese proceso vital al que nos enfrentamos, el de aceptarnos en nuestras propias pieles.
Lin Yung Cheng (3CM): Instagram