De todos los juguetes que cayeron en nuestras manos cuando aún éramos niños, el caleidoscopio era el más sorprendente. A través del visor del cilindro se desplegaba ante nosotros un festival de coloridas formas simétricas.
Este dispositivo óptico fue creado por el físico escocés David Brewster en 1817, desde entonces se han creado numerosos formatos de este sensacional invento. En cualquier juguetería del mundo podemos encontrar este particular catalejo en diferentes formas, tamaños, colores, materiales… y como lo hizo en antaño, en la actualidad sigue colmando la imaginación de los pequeños de esta nueva generación.
Como ya os habíamos contado en otras ocasiones, el artista Adam Hillman tiene un talento innato para descubrir la belleza que se esconde detrás de los objetos cotidianos. A partir de artículos como botones, monedas, clips o incluso tenedores es capaz de crear imágenes psicodélicas que recuerdan de alguna manera a aquello que veíamos por el visor del caleidoscopio cuando jugábamos.
En las composiciones caleidoscópicas de Hillman, docenas de alfileres de costura se transforman en un laberinto caleidoscópico, clips de todos los colores del arcoíris crean un patrón hexagonal, y los bloques de LEGO acomodados por tono dan vida a un círculo cromático muy original.
Es su uso constante de la organización, especialmente en lo que se refiere al color, lo que hace que no puedas apartar la mirada de cada uno de sus trabajos.
Adam Hillman: Instagram