Dijo en alguna ocasión el escritor Rafael Argullol que todo lo que nos rodea desde la cuna es un espectáculo pero la conciencia de ser espectáculo sólo se produce tras observar aquel cuerpo desnudo que, por primera vez, es observado desde el lado de la desnudez.
Un informe de 2018 del Museo Nacional de la Mujer en las Artes revelaba que las obras de mujeres artistas en los principales museos europeos son solo el 13% del total, una desproporción ciertamente ligada al papel de la mujer en la historia pero injustificable si se piensa en la circuito de arte contemporáneo.
En relación con esta tendencia negativa, está a punto de inaugurarse una exposición fundamental en la Fotografiska de Nueva York, en la que se exhiben las fotografías de una treintena de mujeres artistas.
Las imágenes de la exposición “NUDE” muestran un desnudo creativo que claramente se aleja de la pornografía por intenciones y visión, ya que esta expresión artística suele ser identificada por una audiencia superficial y más gravemente por los algoritmos, que anulan el trabajo de los creadores en las redes sociales. La intención de los algoritmos de defender la sensibilidad cultural de sus usuarios contrasta en la exposición con la veintena de nacionalidades de origen de las fotógrafas.
NUDE parte de una mirada femenina y de una interpretación del cuerpo y la feminidad, siguiendo una visión fluída de la identidad de género y la identificación sexual. Los retratos cuentan historias en las que no se da una definición binaria del desnudo, que no es solo masculino o femenino, sino que puede pasar por fases transitorias, durante las cuales se aprecian signos y marcas de operaciones en la piel.
El director de la exposición Johan Vikner afirmó que "esta colección de artistas contemporáneas que utilizan el cuerpo desnudo como lenguaje propio o ajeno en aras del arte, la belleza, la representación, la autoexpresión, como sujeto y objeto, es un ejemplo de lo que realmente es el conocimiento del nuevo desnudo artístico”.
Entre las artistas expuestas en NUDE estarán, entre otras, Malerie Marder, Dana Scruggs, Julia SH, Bettina Pittaluga y Momo Okabe.
La exposición se inauguró el 11 de febrero de 2022 en el Fotografiska de Nueva York.