Augusto De Luca captura en sus retratos lo extraordinario de la humanidad
El filósofo José Miguel Valle dice en uno de sus ensayos: "Eres una persona tan extraordinaria como todas las demás". De esta manera, defiende que cada uno y cada una somos únicos, pero, a la vez, somos iguales.
La condición que nos iguala es precisamente esa que nos identifica como únicos y únicas. Cada persona es una manera diferente de entender el mundo, de razonar la existencia y de desarrollar los motivos que nos mueven a experimentarla de una forma determinada.

En esa búsqueda de lo extraordinario de la humanidad en la magia que supone ser almas genuinas, el fotógrafo italiano Augusto De Luca (1955) ha llenado parte de su prolífica obra de poderosos retratos en blanco y negro en los que juega con el realismo, lo onírico y el simbolismo.
"He tenido siempre dentro de mí el germen del hombre madre; la creatividad me ha acompañado siempre… He buscado expresarme con un estilo determinado pero a través de todos los materiales y los formatos. Deseo descubrir cómo mi creatividad se manifiesta en diferentes circunstancias".



Tras completar su educación secundaria, Augusto se matriculó en la universidad y obtuvo un título de abogado. Pero, a mediados de la década de 1970, la pasión por la fotografía lo llevó a convertirse en fotógrafo profesional, influenciado por nombres como Bill Brandt, Irving Penn, Richard Avedon y Annie Leibovitz.
En el proceso de dar rienda suelta a su creatividad y su genio, se apasionó por la fotografía tradicional y el retrato, pero también por la fotografía experimental. Realiza muchas pruebas utilizando los materiales más variados.


Su estilo se caracteriza por una atención particular para resaltar los detalles expresivos más pequeños del objeto enmarcado. Su producción muestra imágenes de realismo puro, pero también otras donde formas y signos se combinan según indicaciones inspiradas en la filosofía de la metafísica.
La intimista fuerza con la que De Luca inmortaliza a sujetos anónimos o célebres, como la actriz y cantante italiana Lina Sastri o el pintor y compositor austriaco Hermann Nitsch, pone de manifiesto la complejidad y las capas de realidad y fantasía que construyen nuestros "yoes".
Su innegable talento lo ha llevado a exponer en varias galerías en Italia y en el extranjero, en museos y sedes institucionales como la Cámara de Diputados en Roma, además de en institutos culturales y universidades.


Sus fotografías están presentes en varias colecciones públicas y privadas como las de la Biblioteca Nacional de Francia (París), el Archivo Fotográfico Municipal de Roma, la "International Polaroid collection" (Estados Unidos), la Galería de Artes Estéticas de China (Beijing) y el Museo de Fotografía de Charleroi (Bélgica).
A lo largo de su carrera, también ha realizado portadas de discos, vallas publicitarias y libros de fotografía. Augusto De Luca es un artista consciente de su singularidad que vive en un eterno viaje por hacer eterna la de los demás.









Por Luiki Alonso