Os pedimos de antemano disculpas por haceros pasar este mal trago. No solemos -en absoluto- compartir este tipo de informaciones, pero nos hemos cruzado con estas fotografías y nos hemos quedado de piedra.. Ya hemos escuchado que siempre hay un roto para un descosido, ¡pero la realidad supera largamente a la ficción! Parafraseando al gran Obélix, ¡están locos estos rusos!