Que la gastronomía ha alcanzado cotas de arte es algo que sabemos de sobra gracias a todos esos y esas chefs con legiones de seguidores que convierten sus platos en piezas que ofrecen una experiencia única.
Comer bien y comer exclusivo forma parte de nuestro ocio tanto como ir a un concierto o ver una obra de teatro. La gastronomía está más de moda que nunca y perfiles como los y las fooders en las redes sociales, el turismo gastronómico o los programas de cocina de la televisión, son reflejo de ello.
La comida, en su origen, estimulaba primordialmente los sentidos del olfato y del gusto, pero de un tiempo a esta parte, también estimula el sentido de la vista y ya se sabe que lo que entra por el ojo, entra por la boca.
En ese desafío que supone hacer el más bello todavía, el chef David Rivillo hace piezas artísticas y coloridas de algo tan 'común' como la pasta y, tanto es así, que el artista gastronómico acumula ya más de 40.000 seguidores en Instagram.
“Aunque he comido pasta toda mi vida, comencé a trabajar con pasta fresca en 2016 cuando comencé mis estudios culinarios profesionales en Porto Alegre. Desde entonces, compré mi primera máquina para hacer pasta y nunca más volví a comprar pasta en el supermercado", declara.
Macarrones, fideos, raviolis, sorrentinos y otras variantes de pasta son el lienzo sobre el que Rivillo plasma su original estilo y crea sus llamativos patrones multicolor. Viendo sus platos, nos debatimos entre observarlos ensimismados o sacar el parmesano y el orégano.
David Rivillo: Instagram
h/t: Design You Trust