El movimiento se ha convertido en una protesta contra la consideración de los pechos femeninos exclusivamente como objetos sexuales, de una manera en la que los de los hombres no lo son.
Todo empezó cuando una mujer islandesa se hizo una fotografía mostrando sus pechos desnudos y la publicó en Twitter con el objetivo de promover la igualdad entre sexos, pero recibió un buen número de estúpidos y ofensivos comentarios de unos cuantos descerebrados. A pesar de que esos comentarios fueron eliminados, Twitter se inundadó repentinamente de mujeres mostrando sus pechos desnudos.
"Para mí se trata sencillamente de ser como quieras ser", dice Heiður Anna Helgadóttir, jefa de la Asociación Feminista de la Universidad de Islandia, "es sólo una parte del cuerpo. Los niños tienen pechos y pezones y es correcto que los muestren. Lo mismo debe aplicarse a nosotras." De celebridades a miembros del parlamento, en cuestión de minutos, cientos de mujeres salieron a las redes sociales y se pronunciaron en apoyo de los, traduciendo literalmente, pezones libres. De mujeres y de hombres, por igual. La revolución está aquí; es el momento de participar.
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