Desde estos días, podemos sumar a nuestro romántico imaginario de estampas venecianas, estas que protagonizan sus canales limpios, cristalinos y llenos de pequeños peces.
La pandemia del coronavirus está suponiendo un caos que está reestructurando y ordenando otros aspectos de manera colateral; es un hecho que se refleja en varios ámbitos, que el impacto que provocamos en el medio ambiente cuando paramos, es mucho menor.
Imagen de barnyz
Como no hay mal que por bien no venga, ahora resulta que la cuarentena de coronavirus no solo detiene la propagación del virus sino que también tiene algunos efectos positivos en la naturaleza.
En Itlaia, en concreto, los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2) han disminuido significativamente a medida que más y más personas comenzaron a quedarse en sus casas y, ahora, los fangosos canales de Venecia lucen sus aguas tan cristalinas que se ven los miles de pequeños peces que viven allí.
Tras la noticia de la caída de los niveles de NO2, algunas personas comenzaron a especular sobre que el agua se estaba aclarando debido a la reducción de la contaminación sin embargo, estos rumores fueron rápidamente desacreditados.
"El agua ahora se ve más clara porque hay menos tráfico en los canales, lo que permite que el sedimento permanezca en el fondo en vez de subir a la superficie del agua".", dijo un portavoz de la oficina del alcalde de Venecia.
El debate y la polémica lo han llevado a las redes aquellos que apoyan la teoría del alcalde de Venecia y aquellos otros que creen que es otra respuesta de la madre naturaleza ante el respiro que le estamos dando estos días.
Sea como fuere, lo cierto es que los canales y la vida que en ellos se alberga, están más bonitos que nunca.
