Juho Könkkölä pasó más de 50 horas tomando notas y haciendo dobleces para la elaboración de esta obra. La minuciosidad de los pliegues es tal que cuesta creer que la detallada figura haya sido producida exclusivamente en papel, sin usar ningún otro tipo de material ni herramienta.
Una página de 95 x 95 centímetros, esto es todo lo que ha necesitado Könkkölä para dar forma a este guerrero de 28 centímetros de alto con armadura plateada, casco tradicional y espada.
Con tan solo 23 años el artista finlandés combina técnicas de origami húmedo y seco en la construcción de sus espectaculares obras. "Detrás de la escultura del samurái hay varios cientos de pasos para doblarlo desde el cuadrado y probablemente miles de pliegues individuales", explica Juho. "La asimetría en el diseño me permite incluir la espada en un solo brazo mientras puedo hacer que el personaje parezca simétrico".
2 meses de diseño y otro para el plegado ha sido el tiempo que este artista del uragami ha necesitado para su construcción. Aunque confiesa que le "costó un poco de esfuerzo y experimentación". Como para no...
Fue la parte del muslo de la armadura la de mayor dificultad. “A menudo me baso en mis creaciones anteriores y continúo modificándolas y actualizándolas en cosas nuevas. De esa forma puedo seguir aumentando la complejidad de los personajes ”, cuenta Könkkölä haciendo toda una declaración de intenciones.
Puedes ver el hipnótico video donde documenta todo el proceso de trabajo del soldado samurái a continuación.
h/t: Twisted Sifter