Con cosas nos referimos al sexo y por extensión, al orgasmo —¡aunque no es necesariamente la intención última! Lo de la lentitud viene porque en este mundo tan acelerado, en el que nunca tenemos tiempo y todo transcurre a una velocidad vertiginosa, encontrar el momento para el placer calmado es más que necesario.
Esto va según personas y momentos, a veces triunfa el sexo rápido y salvaje y, en otras ocasiones, es el slow sex lo que nos hace vibrar. Un sexo consciente, atemporal e igual o incluso más intenso que su versión rápida.
Hablamos con frecuencia de perder el tiempo, de hacerlo todo con una finalidad que tiene que llegar pronto, de cómo nos molesta esperar. Estamos extraviando la capacidad de disfrutar del camino antes de llegar al destino. Incluso en algo tan divertido como el sexo.
Por todo esto, LELO, la marca sueca de juguetes eróticos de lujo enfocada para aquellas personas que entiende el sexo sin tabúes ni clichés, presenta SILA, un succionador de clítoris creado bajo las premisas del slow sex: estimulación suave, cero prisas, juegos de intensidad y contacto físico. SILA ofrece ocho patrones de vibración, está hecho de agradable silicona premium ultrasuave, es sumergible y fácil de limpiar y cargar.
La sexóloga Valérie Tasso explica que “los orgasmos no deben representar una carrera hacia la meta. Vivimos en la era de la inmediatez, que nos hace querer todo para ya, incluso en lo sexual. Por ello, y a través del estimulador de clítoris SILA, damos paso a la era del slow sex. En ella, primará el disfrute del momento y las mujeres dejarán de lado esa premura y presión por alcanzar el clímax”.
Un estudio de LELO arroja que casi un 80% de las mujeres encuestadas prefiere tomarse su tiempo durante la masturbación y disfrutar del momento. Un porcentaje parecido elige también las relaciones sexuales lentas por encima de las rápidas, aunque la mitad de las veces son así.
Es placenteramente paradójico: cuidar del viaje hacia el orgasmo y no tanto en el orgasmo en sí elimina la presión y con ello, ayuda a alcanzarlo. Incluso de un modo más fuerte y más largo.
“Los resultados entre los hombres encuestados fueron los mismos. Esto respalda todavía más la idea de que la rutina y el trabajo hacen que también vayamos acelerados en lo que se refiere al sexo. Por ello, es importante levantar un poco el pie y tomarnos estos momentos con más calma”, cuentan desde la marca de juguetes.
Independientemente del género y la orientación, el slow sex es una experiencia sexual que se echa en falta, ya sea porque hace posible disfrutar más del momento y despreocuparse por el orgasmo.
Tanto en la autoestimulación como en las relaciones con alguien, el sexo lento nos permite apreciar mejor las sensaciones que se experimentan y conocer qué manifiesta nuestro cuerpo y el de la otra persona.
Date prisa por conocer la gama de juguetes LELO, pero disfrútalos con calma y curiosidad. Con cada segundo que experimentes con ellos, entrarás en un universo de sorpresas y placer hasta alcanzar el orgasmo.