Sabemos muchas cosas de ellos, pero su letra nos pueden desvelar algunos rasgos de su personalidad mucho más íntimos y personales de lo que conocemos.
Conseguir un autógrafo de nuestros ídolos es todo una audacia. Eso, contando con que el personaje en cuestión esté vivo y su firma no se cotice en subasta por inimaginables sumas de dinero.
Dibujos, símbolos, letras inteligibles, lo que queda claro es que algo de nosotros queda recogido en nuestra rúbica. Quizá sea el momento de revisar la nuestra, por si algún día nos hacemos populares...
A tener en cuenta, según la grafología, la mezcla de mayúsculas y minúsculas pueden indicar deslealtad; escribir en forma de hilo delata falta de sinceridad y de autenticidad y no unir algunas letras entre sí, podría ser reflejo de una relación familiar complicada durante la infancia. Después de esto, es probable que comencemos a ver de otra forma a nuestros admirados ídolos.
h/t: Bored Panda