Hace mucho tiempo que se le otorgó a Nueva York el título honorífico de capital del mundo. Una metrópoli fascinante, llena de contrastes, rotunda, diversa… que conocemos sin tan siquiera visitarla a través del cine, la literatura, la música y, por supuesto, la fotografía.
![“NUDE”, una exposición fotográfica de una treintena de mujeres artistas dedicada al desnudo [NSFW]](https://culturainquieta.com/wp-content/uploads/2022/02/5fb73dd4a90056a36ad99a4cdbfe2379-f48.jpg "“NUDE”, una exposición fotográfica de una treintena de mujeres artistas dedicada al desnudo [NSFW]")
Dijo en alguna ocasión el escritor Rafael Argullol que todo lo que nos rodea desde la cuna es un espectáculo pero la conciencia de ser espectáculo sólo se produce tras observar aquel cuerpo desnudo que, por primera vez, es observado desde el lado de la desnudez.
En la primavera de 1980 el fotógrafo Bruce Davidson descendió al mundo que hay en las profundidades del metro de Nueva York para comenzar el proyecto ‘Subway’.
Todo el que vive en grandes ciudades o las ha visitado para hacer turismo, seguro que ha usado el medio de transporte más eficaz y más popular que hay, el metro.
Es realmente curioso descubrir como en el reino animal se imitan comportamientos que, apriori, son propiamente humanos y que en muchas ocasiones dan lugar a situaciones surrealistas, absurdas, increíbles... en definitiva, divertidas.
En 'Beginners' de Mike Mills, Mélanie Laurent le dice a Ewan McGregor que la mitad de la gente cree que nada va a salir bien y la otra mitad cree en la magia. Llamémoslo magia, serendipia o casualidad.
Hay algo morbosamente perturbador en eso de observar sin ser observado, de ver sin ser visto, de invadir la intimidad de otros que no han sido lo suficientemente cuidadosos a la hora de esconder sus actos.
A orillas del río Hudson, desde donde la ciudad de Nueva York ruge a golpe de días y noches sin tregua, emerge el busto de una mujer que clama el silencio.
El origami es el arte milenario de origen japonés que normalmente se hace a pequeña escala y que consiste en hacer figuras de papel sin usar tijeras ni pegamento, solo mediante dobleces y pliegues.
Siempre celebramos cualquier idea o iniciativa que sirvan para llenar de luz y color la rutinaria y gris vida diaria y, mucho más, si implican el arte y una genial combinación de varias de sus disciplinas.