El poder, la oscuridad y hasta el mismísimo diablo se materializan en un animal tan fascinante. El artista resignifica estas históricas concepciones culturales con diminutas figuras que nos llevan por caminos psicotrópicos.
La elegancia en el reino animal podría estar personificada en las serpientes. Su piel, tan brillante, tersa y con unos colores llenos de vida que se expande y contrae por sus escamas. Sus estampados, con variaciones, manchas, degradados, uniformes… Y su manera de moverse, reptando por las superficies con sigilo, como si estuvieran a punto de atacar en cualquier momento, realizando un sutil baile de lado a lado.
Las serpientes son tan fascinantes como siniestras y, gracias al talento de Ryan Eicher, ahora también son psicotrópicas. Este soplador de vidrio toma la forma de estos animales y crea diminutas figuras con detalles, colores y adornos que los hacen un poco más simpáticos.
Desde tonos neones, hasta degradados que terminan en trazos con líneas blancas sobre un fondo transparente propio del cristal, el artista norteamericano no encuentra límites en su inspiración a la hora de fabricar sus serpientes.
Los patrones de color en sus creaciones las hacen hipnóticas y les confieren un aspecto similar al de las canicas. Arcoiris, manchas, líneas… todas se adaptan a la forma curva de su fisionomía.
Muchas culturas consideran a las serpientes como un elemento maligno, siendo la materialización del diablo en la Tierra, mientras que otras les confieren poderes mágicos, curativos y protectores. Lo que está claro es que es un animal que fascina a los seres humanos desde que existen registros y este soplador de vidrio no se queda atrás.
Algunas de las piezas creadas por Eicher están disponibles en su página de Etsy, y donde también se encuentra su colaboración con artistas como Future Glass y Emerson. Cualquiera puede tener una resignificación en miniatura de una serpiente psicotrópica en la palma de su mano.
Ryan Eicher: Etsy | Instagram