No nos cabe duda de que Marilyn Monroe hubiera sido una anciana adorable, todavía inmensamente bella y que quizá hubiera aprendido a quererse un poco más y a encajar con más suerte los golpes de la vida e incluso a vivirla y disfrutarla.
Desde aquí nuestro humilde homenaje a la gran Marilyn a través de 5 escenas emblemáticas que nos regaló para la eternidad. Felicidades allá donde estés Marilyn.
1. Los caballeros las prefieren rubias (1953)
Monroe interpretaba a Lorelai Lee, una ingenua cantante y bailarina. Las dos actrices se hicieron muy amigas, y Russell declaró que Marilyn era “muy tímida, muy dulce, y mucho más inteligente de lo que la gente piensa”. Inmortal es la canción de Marilyn "Diamonds are a girl’s best friend" que se creó para la obra de Broadway en la que se basaba la película, pero fue Marilyn la que la convirtió en inmortal. Una actuación inolvidable desde la coreografía hasta el vestido, en la que utilizó su propia voz excepto en un par de frases. El AFI la considera una de las canciones más importantes de la historia del cine.
2. La tentación vive arriba (1955)
En la película, dirigida por Billy Wilder, Marilyn interpreta a la ingenua chica que desde el piso de arriba tienta al protagonista. El resultado fue una divertida comedia que la AFI ha citado entre las 100 mejores, pero la película ha pasado a la historia por la inolvidable imagen de Marilyn sujetándose las faldas tras pasar por encima de una rejilla de ventilación del metro. Para grabar la secuencia, el equipo de rodaje se trasladó a Nueva York, donde la rubia actriz causó una gran sensación. La película fue un rotundo éxito de taquilla y la actriz recibió buenas críticas incluyendo una nominación a los BAFTA, lo que le permitió recuperarse de la depresión por el fracaso de su matrimonio y de su anterior film.
3.Bus stop (1956)
“Bus stop”, una comedia dirigida por Joshua Logan. En esta película, la actriz interpreta a Chérie, una cantante de taberna con talento limitado de la que se enamora el cowboy “Bo” Decker. Su vestuario, maquillaje y peinado reflejaban un personaje que carecía de sofisticación, y Marilyn canta y baila intencionadamente de manera mediocre para un público que no la aprecia en una secuencia que no podemos ver a continuación, por problemas de derechos, pero que se ve en una parte del trailer. Una gran actuación que debería haber sido premiada, según el director, con la nominación al Oscar, pero que en su lugar se vio recompensada por la nominación en los Globos de Oro.
4. Con Faldas y a lo Loco (1959)
Lemmon y Curtis huyen de la mafia disfrazados de mujer e incorporándose a una banda de música femenina. Allí conocen a la sexy e ingenua Sugar Kane. Así empieza esta imprescindible comedia, una de las más famosas -y mejores- de la historia del cine, con una curvilínea Marilyn en estado de gracia. Wilder arriesga con una historia que, de no haber sido tan genial, hubiera bordeado el ridículo. Nada más lejos de la divertida irrealidad de mujeres musculosas y millonarios simpáticos. Cada escena es mejor que la anterior. Una obra maestra imperecedera cuyo delirante diálogo final pone broche a un film en verdad perfecto.
5. Vidas rebeldes (1961)
Miller había escrito un cuento corto titulado “Vidas rebeldes”, que decidió ampliar hasta dar lugar a un guion cinematográfico que pudiera interpretar Marilyn. También pensaba en Clark Gable, ídolo de infancia de la actriz, para el papel que terminó siendo el último del actor de “Lo que el viento se llevó”. Cuando Miller empezó a escribir la adaptación, estaba profundamente enamorado de la actriz protagonista, pero tras varias reescrituras, terminó plasmando en la historia sus problemas con ella. Pero la actuación de Marilyn resultó magnífica y conmovedora. También la que se siente como más cercana a su tragedia personal, probablemente por el conocimiento que tenía de ella Miller. La secuencia donde tratan de cazar una manada de potros, que puedes ver a continuación, se pudo rodar por fin, pero tras una espera de varios meses de interrupciones. Resultó durísima en el plano físico, pues a pesar de contar con especialistas, en los planos medios y cortos eran los actores los que hacían las escenas, incluida Marilyn.