El cine nos emociona, nos hacer reir, sufrir, llorar... Y a veces, hay escenas de películas, que hasta nos cambian un poco la vida. No nos cansamos de ver esta joya dirigida por Gus Van Sant, en 1997.
Will es un joven e inadaptado rebelde con una inteligencia asombrosa, especialmente para las matemáticas. La vida le pone en su camino a un psiquiatra solitario y con pocas ganas de vivir porque siente que ya ha vivido todo lo que tenía que vivir: Sean, un psicoanalista, freudiano, con infancia de malos tratos, enamorado de su trabajo, viudo de un gran amor.
Podríamos quedarnos con miles de escenas de la película, pero elegimos ésta en un parque de Boston, que nos emociona especialmente.
"Si te preguntara sobre arte, me darías una lista de libros.
Miguel Angel, sabes mucho sobre él. Su trabajo, sus aspiraciones políticas, él y el Papa, sus preferencias sexuales, todo.
Pero no puedes decirme a qué huele la Capilla Sixtina, nunca has estado ahí ni has visto ese hermoso techo, no lo has visto.
Si te preguntara sobre mujeres, me darías un listado de tus favoritas.
Quizá hasta te hayas acostado algunas veces, pero no puedes decirme lo que es despertar con una mujer y ser realmente feliz. Eres un chico duro.
Si preguntara sobre la guerra, me hablarías de Shakespeare "Una vez más a la brecha, queridos amigos..." Pero nunca has estado cerca de una, nunca has tenido la cabeza de tu mejor amigo en tu regazo agonizando y pidiéndote ayuda.
Si te preguntara sobre el amor, citarías un soneto, pero nunca miraste a una mujer y te sentiste vulnerable.
Ni has conocido a alguien que te absorbiera con los ojos. Como si Dios hubiera bajado un ángel sólo para ti, que pudiera rescatarte del infierno.
Ni sabes qué se siente ser un ángel para ella.
Tener ese amor por ella para siempre pasando por todo, pasando por el cáncer.
No sabes qué es dormir en un hospital por dos meses sosteniendo su mano, y que los doctores sepan que no respetarás las horas de visita.
No sabes lo que es una pérdida.
Eso sólo pasa cuando amas algo más que a ti mismo.
Dudo que hayas osado amar tanto a alguien.
Te veo y no veo a un hombre inteligente y confiado.
Veo a un chico arrogante y muerto de miedo.
Pero eres un genio, Will; es indudable.
Nadie podría entender tu complejidad.
Pero crees saber todo sobre mí por ver mi pintura.
Hiciste pedazos mi puta vida.
Eres huérfano, ¿verdad?
¿Crees que sé lo dura que ha sido tu vida, cómo te sientes y quién eres, porque leí "Oliver Twist"?
¿Eso te define?
Personalmente, No me importa una mierda, por que no hay nada que no pueda saber sobre ti que no pueda leer en un puto libro.
A menos que quieras hablar sobre ti mismo sobre quién eres.
Entonces estaré fascinado, a esa me apunto
Pero no quieres hacer eso, ¿verdad?
Te aterroriza decir los que sientes...
Tú mueves, chaval..."
Además, queremos resaltar la maravillosa BSO, parte de nuestro añorado y admirado Elliot Smith, vaya desde aquí un homenaje a dos ángeles (Robin Williams y Elliot Smith) que se fueron con prisas y desaliento de esta vida. Seguro que tienen largas conversaciones en algún parque público allá donde estén.