La obscena serie de pinturas del artista estadounidense Jeff Faerber basada en estampas japonesas de shunga tradicionales no se limita a captar la mirada de los grabados originales, sino que los actualiza con figuras occidentales y con gadgets occidentales de hoy en día.
Su estilo es una representación de un mundo surrealista con elementos esparcidos. Una energía de ritmo rápido se emite desde sus piezas y le da al espectador una sensación de urgencia para dar sentido a sus propias sensibilidades, a la poesía y la investigación espiritual.