La crema solar no parece suficiente para la población, que ha decidido añadir un accesorio que mantenga su piel bien blanca.
Las chanclas, la toalla, la sombrilla, el bañador… y el facekini. En las playas chinas los bañistas no pueden olvidarse de meter en su bolsa un accesorio tan novedoso, como perturbador.
Conocido como facekini, esta prenda no deja de ser una máscara que la población se pone en la cara para protegerse de los rayos, evitar quemarse y, de paso, mantener el color blanco en su piel, muy relacionado en su cultura con el estatus de las clases altas.
Ahorrarse el bronceado en la cara es más fácil que nunca con este método, pero, ¿a qué precio? Las imágenes de los bañistas parecen sacadas de una película de terror.
El responsable de este invento es Zhang Shifan, natural de la ciudad costera de Qingdao, donde encontró una necesidad y cómo cubrirla -literalmente- en 2004 con el facekini.
El artículo se convirtió en un éxito nada más salir al mercado y en Qingdao, uno de los destinos turísticos de costa más populares en China, es difícil encontrar a algún bañista que no la lleve.
El facekini también es usado contra las picaduras de medusas y las algas marinas presentes en el mar.
Sea como sea, el facekini ha llegado para quedarse, por el momento, en China. ¿Se expandirá su uso al resto del mundo?