La enorme instalación es obra de la artista argentina Mara Minujín y se alza triunfante en la ciudad de Kassel (Alemania). Esta obra encierra una biblioteca vergonzosa para la historia de la humanidad.
Cada uno de los casi cien mil libros que hacen de ladrillos en esos virtuales muros milenarios integran elencos de títulos prohibidos en algún lugar del mundo y en algún momento de la historia.En la plaza alemana donde se exhibe, los nazis quemaron libros en 1933.
Cuando la instalación se desarme todos estos libros que hoy están protegidos por bolsas plásticas e impermeables para evitar que se dañen, sean distribuidos en refugios de migrantes y bibliotecas públicas de toda Europa, una decisión que cierra el círculo abierto con la idea de mostrar lo que otros quisieron hacer desaparecer.
El nuevo Partenón de libros prohibidos de Marta Minujín se levanta en el marco de documenta 14, la importante muestra de arte contemporáneo quinquenal que abre el sábado en Kassel, Alemania.
«Esta obra es un homenaje a la democracia, un símbolo de resistencia a la represión política y es una obra efímera, ya que al finalizar la exposición en Kassel los libros serán donados a refugios de migrantes y a bibliotecas públicas de toda Europa», describe la proyección en el tiempo y en la historia de su creación.