¿Qué habría ocurrido si Simone de Beauvoir, Hannah Arendt, Simone Weil y Ayn Rand hubieran coincidido en un café de París en la década de los 30?
Gracias a Pijama Surf.
Aunque sus vidas y pensamientos recorrieron caminos distintos, todas compartían un compromiso inquebrantable con la reflexión en un mundo que se desmoronaba.
"El fuego de la libertad" (The Visionaries), de Wolfram Eilenberger, es una inmersión en la vida y el pensamiento de estas cuatro filósofas que marcaron el pensamiento del siglo XX.
Simone de Beauvoir, Hannah Arendt, Ayn Rand y Simone Weil fueron probablemente las mujeres filósofas más brillantes del siglo XX y son ahora el tema principal del libro de Wolfram Eilenberger.
Weil y de Beauvoir se conocieron en el École Normale de París, siendo Weil la que obtuvo la calificación más alta en su generación. Tanto Arendt como Weil y Rand provenían de familias judías.
Sin embargo, solo Weil tuvo una inclinación a la religión y al misticismo, aunque paradójicamente cristiana y hasta oriental. Nada más lejano de la filosofía de Ayn Rand que tomaba al empoderamiento del sí mismo y la búsqueda de la propia felicidad como el centro de su filosofía (Weil elegía el sacrificio y la generosidad).
Pese a esto no hay duda que habrían puntos en común, sobre todo entre Arendt y Weil y la conversación sería imperdible.
A través de sus experiencias personales y sus ideas, el autor reconstruye una época convulsa que, entre 1933 y 1943, vio surgir algunas de las teorías más revolucionarias de la filosofía moderna.
Simone de Beauvoir exploraba el equilibrio entre el individualismo y la solidaridad en una Francia en ebullición; Hannah Arendt analizaba el poder y la libertad tras su huida de la Gestapo; Simone Weil, con su inclinación mística, reflexionaba sobre el sacrificio y lo sagrado; mientras Ayn Rand defendía con vehemencia el individualismo desde el otro lado del Atlántico.
Eilenberger conecta estas trayectorias con una narrativa que destaca cómo estas mujeres no solo pensaron, sino que vivieron sus ideas incluso en circunstancias extremas.
Según el autor, su objetivo es mostrar cómo estas figuras encarnaron lo que significa “existir filosóficamente” de forma excepcional.
Especial mención merece Simone Weil, descrita por Albert Camus como “el único gran espíritu de nuestro tiempo”. A menudo ignorada por la filosofía académica, Weil se ha convertido en una figura central para quienes buscan un pensamiento profundo y transformador.
Este libro es un viaje al corazón de un período histórico crucial y, al mismo tiempo, un recordatorio del valor de las ideas y de la libertad en tiempos de incertidumbre. En palabras de Eilenberger, estas cuatro mujeres representan la resistencia intelectual frente a las sombras de su tiempo, y quizás también frente a las del nuestro.