La Inteligencia Artificial es uno de los temas que más copan nuestras conversaciones actuales. No deja de ser curioso que siga sorprendiéndonos el poder ilimitado que puede tener un 'software' cuando el cine lleva décadas avisándonos de lo que va a pasar, de lo que ya está pasando.
Androides, programas de última generación, realidades paralelas, aplicaciones algorítmicas o seres del metaverso pueblan este recorrido formado por 14 obras maestras que se adelantaron al presente mostrando un futuro en el que ser humano es salvado o devorado por sus propias creaciones.
1. Ex Machina (Alex Garland)
¿Será Ava, la cyborg protagonista de esta cinta, real en unos años? ¿Es conveniente crear algo más perfecto que nosotros?
En Ex Machina, el director Alex Garland nos cuenta las consecuencias de que el hombre se crea un Dios que es capaz de materializar a un ser superior a su imagen y semejanza, y lo hace en clave de vibrante thriller de ciencia ficción minimalista en los que se que cuecen la acción y el clímax a fuego muy lento.
2. 2001: una odisea del espacio (Stanley Kubrick)
Con permiso de Eyes Wide Shut, 2001: una odisea del espacio es la cinta de Kubrick que más divide al público entre los que la califican de obra maestra y los que creen que es una paja mental ambiciosa y tediosa.
En esta cinta que asentó las bases de mucho del cine de ciencia ficción existencialista actual, los protagonistas son un astronauta reflexivo y una Inteligencia Artificial rebelde y con decisión propia, la inolvidable y desasosegante HAL 9000.
3. Juegos de guerra (John Badham)
Muchos nostálgicos de los años 80 soñaban con poder ser el joven Mathew Broderick en Juegos de guerra, un Mr.Robot de Commodore capaz de saltarse cualquier sistema de seguridad y descifrar cualquier código.
Un día cualquiera, desde la tranquilidad de su habitación de adolescente, David conecta su ordenador al del Departamento de Defensa Norteamericano, encargado del sistema de defensa nuclear. Sin comerlo ni beberlo, su juego se convertirá en una carrera contrarreloj por evitar la Tercera Guerra Mundial.
4. Her (Spike Jonze)
El cine de Spike Jonze es el de un romántico empedernido con aires de hipster y de intelectual con un exquisito gusto por lo estético y un talento increíble para no quedarse en la superficie, llegando a nuestros corazones.
En Her, una de sus películas más icónicas y adoradas, narra el romance entre un anodino hombre, Theodore (Joaquin Phoenix) y Samantha (Scarlett Johansson), un sistema operativo con la capacidad de amar y de llenar el vacío existencial del más nihilista.
5. Metrópolis (Fritz Lang)
Hace casi 100 años, Fritz Lang hizo una increíble reflexión sobre la moralidad del progreso. El creador alemán nos invitaba a preguntarnos si las máquinas serían buenas o malas para nuestro desarrollo. Con ellas, como con las sociedades que construimos, podemos hacer maravillas o cosas terribles.
Freder, el hijo del creador de una sociedad distópica dictatorial, se da cuenta de las injusticias de su mundo. Metiéndose en la piel de un obrero durante un día entero conoce a María, una líder natural que asegura que los obreros se unirán a la clase privilegiada. Freder se enamora de María, pero su padre boicotea el romance y la rebelión, creando una androide que generará el caos.
6. Terminator 2: el juicio final (James Cameron)
Con el Padrino II, Terminator 2: el juicio final puede presumir de desmentir el dicho de "segundas partes nunca fueron buenas". La que probablemente sea la mejor película de James Cameron hizo icónico a un Arnold Schwarzenegger que, en esta secuela de la original Terminator, era reprogramado para salvar a la humanidad.
La misión de este androide hipermusculado es viajar del futuro al presente para salvar la vida de John Connor, un adolescente rebelde que, sin saberlo, tiene el papel de destruir las máquinas que un futuro convertirán la Tierra en un escenario postapocalíptico.T-1000, el villano de esta secuela, se convirtió en uno de los mejores antagonistas del cine contemporáneo.
7. Wall-E (Andrew Stanton)
La fábrica de sueños Pixar no sólo obra un milagro de la animación en cada una de las cintas que lanza, sino que además demuestra que las películas para niños (y adultos) pueden transmitir mensajes llenos de valores.
En Wall-E, el realizador Andrew Stanton nos hacía caer rendidos ante un robot enamoradizo y soñador con buenas intenciones y con una conciencia medioambiental ejemplar. El mundo sería mucho más amable si los humanos fuéramos como esta adorable máquina llena de vida y sensibilidad.
8. Inteligencia Artificial (Stanley Kubrick/Steven Spielberg)
El último proyecto escrito por Stanley Kubrick se quedó, tras la muerte del genio en 1999, en manos de un Spielberg que convirtió esta fábula oscura y desoladora en un cuento de Disney con moraleja final. La diferencia de tonos con los que está rodada la primera hora y media de la película y la segunda, no lastra un título que merece ser reivindicado.
Los humanos necesitan, a causa de la falta de recursos provocada por el calentamiento global, permisos de natalidad muy difíciles de adquirir. Por ésto crean a David, un prototipo creado por Cybertronics y diseñado para parecerse a un niño y mostrar amor por los seres humanos
9. Blade Runner (Ridley Scott)
Aunque en su momento Blade Runner fue vapuleada por la crítica e incomprendida, con los años se ha convertido en una cinta de culto con una legión de admiradores que han encumbrado esta historia neo noir de humanos y Replicantes en el olimpo de la ciencia ficción.
Rick Deckard (Harrison Ford), un blade runner retirado, vuelve a ser requerido para dar caza y captura a un grupo de Replicantes que han decidido rebelarse por su condición de esclavos y están dispuestos a dominar la sociedad de un futuro distópico salida de la mente de Ridley Scott.
10. Ghost In The Shell (Mamoru Oshii)
Una de las cintas de anime más celebradas e influyentes del cine reciente, por su estética y también por la premisa de su historia: ¿y si las máquinas comenzaran a tener algo muy parecido a eso que en el ser humano llamamos alma o espíritu?
En un futuro próximo, Mayor es una humana cuya vida fue salvada tras un espeluznante accidente y ha sido sometida a un proceso de ciber-regeneración gracias al cual se ha convertido en el arma perfecta. Mayor tendrá que detener a unos peligrosos terroristas cuyos poderes los hacen capaces de apropiarse de la voluntad de las personas y someterlas a sus designios.
11. Matrix (Hermanas Wachowski)
Con Matrix, la primera entrega de una saga muy irregular que se perdió en tramas pseudo filosóficas y pseudo religiosas que alcanzaron cotas ridículas, las hermanas Wachowski revolucionaron el cine tal y cómo lo conocíamos y crearon escuela con unos efectos digitales nunca vistos.
El prometedor inicio de esta aventura cyberpunk llena de látex, gafas de sol, banda sonora trepidante y artes marciales que desafiaban a la gravedad, nos trasladó a un futuro en el que las máquinas desarrollaban una portentosa inteligencia capaz de someter a la humanidad y hacerles vivir una simulación que asumen como su realidad.
12. Alphaville (Jean-Luc Godard)
Alphaville cuenta una aventura del famoso detective Lemmy Caution creado por el escritor inglés Peter Cheyney e interpretado por un lúgubre, desgastado, misterioso y genial Eddie Constantine.
Jean-Luc Godard, una de las figuras más representativas de la nouvelle vague, sorprendió a su fiel público con la historia de este detective que llega al régimen totalitario de Alphaville para rescatar a un espía y tratar de matar al creador de la Inteligencia Artificial que controla todos los aspectos de la vida en la ciudad.
13. Crímenes del futuro (David Cronenberg)
La filmografía de David Cronenberg está llena de películas en las que investiga y disecciona las miserias y el lado oscuro de la sociedad creando metáforas y analogías que materializa a través del subgénero body horror.
En su último trabajo hasta la fecha, reune a un elenco de actores de la talla de Viggo Mortensen, Léa Seydoux y Kristen Stewart. Saúl (Mortensen) es un artista que usa su propio cuerpo y sus propios inventos para realizar performances en las que muestra cómo mutan sus órganos o cómo se regeneran. Saúl puede ser el próximo eslabón de la cadena evolutiva.
14. Belle (Mamoru Hosoda)
En un intento por adaptar a la era Internet el conocido cuento de La bella y la bestia y dar un salto mortal que zambulle al espectador en el desconocido e intrigante metaverso, el director japonés Mamoru Hosoda nos invita a conocer Belle: un portentoso ejercicio de animación lleno de todas esas capas que componen el universo virtual del que se habla en la cinta.
La película nos presenta a Suzu, una joven de 17 años que, tras perder a su madre, se traslada a vivir con su padre a las afueras de la prefectura de Kochi. Con el corazón roto y distanciada del mundo, descubreU, un espacio virtual en el que todo el mundo puede ser quien quiera ser.